El club de la pluma libre

El Club de la Pluma libre está formado por un conjunto de escritores que tiene en común haber publicado sus obras de forma independiente por cuenta propia o en pequeñas editoriales.

El sueño de cualquier escritor es encontrar los ojos de un lector que se posen en su obra. Después de mil horas buscando la manera de contar una historia de una forma lo más atractiva posible, de tirar cientos de hojas a la papelera, de vueltas y más vueltas con la corrección; llega el momento de darles vuelo. Una tarea difícil o incluso titánica, si decides hacerlo de modo independiente sin el respaldo de una editorial.

En España se publican cada año más de 80.000 libros. Destacar en esa selva, es un tanto difícil si no te encuentras en el grupo de los privilegiados. Abrirse camino con el boca a boca, las redes y un puñado de presentaciones son caminos posibles, pero lentos y difíciles, especialmente cuando tienes un trabajo y/o una familia que atender. Esta dificultad se multiplica cuando la publicación es independiente, ya que no dispones de orientación ni apoyo para realizarla. Aun así, son muchos los autores que optan por esta modalidad, por diversos motivos. Entre los más importantes podríamos señalar los siguientes:

Por conservar intactos los derechos sobre su obra y la libertad de creación.
Por evitar el largo proceso de esperar respuesta de una editorial, que puede demorarse meses o no llegar.
Porque el rechazo de una editorial puede deberse a simples criterios comerciales o de marca, sin tener nada que ver con la calidad de la obra, una editorial es una empresa a la búsqueda de beneficios. Pero el impacto emocional en el autor, que ha invertido tiempo, energía e ilusión en la obra, es grande en todos los casos.
Porque, aún siendo aceptado el manuscrito por una editorial; las condiciones que ofrecen en muchos casos en cuanto a promoción y distribución de la obra, son prácticamente las mismas que para una publicación independiente o autopublicación.
Los problemas a los que se enfrenta un autor independiente son muchos:
Desconocimiento del mercado editorial y su funcionamiento
Falta de distribución
Desconocimiento de las herramientas de marketing y publicidad
Falta de tiempo para la labor promocional
Negativa de las librerías a poner el las estanterías una obra sin sello editorial, o con un sello poco conocido
Falta de acceso a ferias y acontecimientos culturales, que en muchos casos no admiten autopublicados o publicados a través de las mal llamadas editoriales de autopublicación.
Desconocimiento de la legalidad y el proceso de venta
Falta de medios para afrontar una promoción, por no hablar de tiempo y energías.
Falta de valoración profesional de las obras. Una orientación profesional es muy importante en la vida de un escritor, ya que le ayuda a mejorar, a crecer y le aporta seguridad.
Falta de visibilidad, el libro no está físicamente en casi ningún sitio.

Por si todos estos motivos fueran pocos, existe una desconfianza, a priori, sobre la calidad de la autoedición. Por una parte, es cierto que la única condición para poder publicar una obra de forma independiente es poder pagarla. El mercado literario independiente cuenta ahora mismo con títulos de calidad pésima y el lector no tiene forma de distinguir unos de otros. Por otra, existen los sellos editoriales de autoedición que a priori deberían dar algún servicio al autor y alguna garantía al lector. Pero lo cierto es que sus servicios van poco más allá de la impresión. La maquetación y corrección en muchos casos son francamente deficientes, la elección de portada pésima, la distribución inexistente y además, se olvidan del autor una vez han cobrado la factura. El lector por su parte, tampoco puede confiar en estos sellos, pues las ganancias las obtienen de la impresión y por lo tanto, imprimen cualquier cosa con tal de que les paguen. Mención especial merecen los que disfrazados de “pequeña editorial tradicional”, publican en mala calidad, le cobran al autor (obligación de comprar x cantidad de ejemplares), la promoción es igual de inexistente que en el caso anterior, se quedan con los derechos y en algunos caos, ni siquiera pagan las regalías comprometidas.

Frente a todo esto, algunos autores independientes hemos decidido unir fuerzas y ayudarnos entre nosotros.

Formando una red de conocimiento colectivo que nos ayude a gestionar los procesos, promociones y problemas diversos.
Haciendo piña para conseguir presencia como grupo en ferias, eventos y redes.
Dando una garantía de calidad a los lectores de nuestras obras.
Para ello exigimos a los autores del grupo:
Tomar en serio sus obras: Deben haber pasado por un corrector profesional, contar con una portada y una maquetación cuidada. Ser obras bien construidas, cuidadas y estructuradas.
Implicación en el funcionamiento y en los proyectos que se pongan en marcha, cada uno en la medida de sus posibilidades.
Participación en la promoción de los compañeros.

Si esto está en las entrañas del grupo, podemos conseguir mucho. Si nosotros somos honestos y los primeros críticos de los compañeros, si aceptamos las críticas y buscamos el modo de mejorar, podremos dar una garantía a nuestros lectores. Si todos participamos y aportamos lo que buenamente podemos, seremos mucho más que la suma de las partes. Podemos convertirnos en un sinónimo de calidad y un grupo a tener en cuenta para los que ahora nos cierran las puertas. Pero además, creceremos como autores y como personas.